Una candidatura para unir al 90%
donde estén representados todos los sectores que
sufrimos los recortes y el saqueo impuestos por
el FMI y Berlín,
desde la base, pueblo a pueblo y ciudad a ciudad
con un programa que coja como centros:

- Redistribución de la riqueza
- Ampliación de la democracia
- Defensa de la soberanía nacional
- Unidad de todos los sectores afectados por la crisis

domingo, 6 de marzo de 2016

FEMINISMO Y MOVIMIENTO OBRERO


La mujer trabajadora, 
junto al hombre son el motor de la economía 
y el sostén de toda la humanidad, 
sin trabajo no hay nada, 
nosotros sin capitalismo vivimos, 
el capitalismo sin nosotros no vive.

Los movimientos feministas y sufragistas estuvieron dirigidos por mujeres de procedencia burguesa. A pesar de que los planteamientos feministas eran interclasistas, sus ideas no lograron penetrar ampliamente en los ambientes obreros. Ni feministas, ni sufragistas consiguieron nunca movilizar ampliamente a las mujeres trabajadoras.

Los propios ideólogos del primer movimiento obrero, en la primera mitad del siglo XIX, mantuvieron posturas contradictorias respecto a la igualdad de derechos de la mujer.

Flora Tristán (1803-1844), hija de un criollo peruano y una francesa, es la gran pionera del feminismo socialista.

“A vosotros, obreros que sois las víctimas de la desigualdad de hecho y de la injusticia, a vosotros os toca establecer al fin sobre la tierra el reino de la justicia y de la igualdad absoluta entre la mujer y el hombre. Dad un gran ejemplo al mundo (...) y mientras reclamáis la justicia para vosotros, demostrad que sois justos, equitativos; proclamad, vosotros, los hombres fuertes, los hombres de brazos desnudos, que reconocéis a la mujer como a vuestra igual, y que, a este título, le reconocéis un derecho igual a los beneficios de la unión universal de los obreros y obreras”. Flora Tristán La Unión Obrera 1843

Esta posición contrasta claramente con la misoginia de alguno de los primeros ideólogos del movimiento obrero como Ferdinand Lasalle (1825-1864) y, sobre todo, Pierre-Joseph Proudhon (1809-1864). Este último afirmaba claramente que una mujer igual al hombre significaría “el fin de la institución del matrimonio, la muerte del amor y la ruina de la raza humana”. El lugar ideal para la mujer era el hogar. Para Proudhon las cosas estaban claras: “no hay otra alternativa para las mujeres que la de ser amas de casa o prostitutas”.

fueron Karl Marx (1818-1883), Friedrich Engels(1820- 1895) y August Bebel (1840-1913) los que establecieron las bases del pensamiento socialista sobre la “cuestión de la mujer”.
Engels en su libro "El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado" (1884) equiparaba la dominación de clase con la dominación de la mujer por el hombre. Sin embargo, para él como para Marx, 


la emancipación de la mujer sólo se haría realidad tras una revolución socialista que liquidara el capitalismo

Por consecuencia, la lucha de las mujeres debía subordinarse, o como mucho ir unida, a la lucha de clases, ya que, de hecho, no había diferencia alguna de objetivos. Para Marx y Engels, la igualdad política entre los sexos era una condición necesaria para la plena emancipación de la sociedad. Además, los fundadores del socialismo científico entendían que la base fundamental de la emancipación femenina era su independencia económica frente al hombre.

“La mujer es un ser libre e inteligente, y como tal, responsable de sus actos, lo mismo que el hombre; pues, si esto es así, lo necesario es ponerla en condiciones de libertad para que se desenvuelva según sus facultades. Ahora bien, si relegamos exclusivamente a la mujer a las funciones domésticas, es someterla, como hasta aquí, a la dependencia del hombre, y, por lo tanto, quitarle su libertad. ¿Qué medio hay para poner a la mujer en condiciones de libertad? No hay otro más que el trabajo”.

Congreso de la Federación Regional Española de la AIT
Zaragoza (1872)
Cit. NASH,M. (Ed.)
Més ennllà del silenci. Les dones à la història de Catalunya
Barcelona, 1988

Corresponde a August Bebel, dirigente socialista alemán, el mérito de ser el primer teórico marxista que escribió de una forma específica sobre la mujer en su libro La mujer y el socialismo (1879).

“La mujer de la nueva sociedad será plenamente independiente en lo social y lo económico, no estará sometida lo más mínimo a ninguna dominación ni explotación, se enfrentará al hombre como persona libre, igual y dueña de su destino”.

August Bebel
La mujer y el socialismo
1879

Por último, hay que destacar, dentro de la socialdemocracia alemana, la figura de Clara Zetkin (1857-1933). Creadora del Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo, fue la gran propulsora del feminismo en la Segunda Internacional o Internacional Socialista. En 1907, se celebró, bajo sus auspicios, la I Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas. Esta organización llegó a agrupar 174.751 afiliadas en 1914.

En nuestro país la existencia de una sociedad arcaica, con escaso desarrollo industrial, con una fuerte ascendencia de la Iglesia Católica y fuertes jerarquizaciones de género en todos los ámbitos de la vida social, dio lugar a que el feminismo tuviera durante el siglo XIX una menor presencia e influencia social que en otros países.

En un país en el que la práctica política estaba circunscrita a un minoría social (voto censitario) y en el que las prácticas electorales (adulteración de las elecciones) y el protagonismo del ejército (pronunciamientos) marcaban la dinámica política, no nos debe extrañar que el feminismo pionero no se centrara en reivindicaciones políticas, como el derecho de sufragio, sino que se basara en demandas sociales, buscando el reconocimiento de sus roles sociales como tal género femenino (maternidad y cuidado de la familia) y en la exigencia de los derechos civiles.

Las dos grandes figuras son Concepción Arenal (1820-1893) y Emilia Pardo Bazán (1851-1921).

La escritora gallega Emilia Pardo Bazán denunciaba en la España Moderna(1890) que los avances culturales y políticos logrados a lo largo del siglo XIX (las libertades políticas, la libertad de cultos, el mismo sistema parlamentario) sólo habían servido para incrementar las distancias entre sexos, sin promover la emancipación femenina.

La penalista Concepción Arenal insistió en múltiples escritos en que el papel de madre y esposa eran fundamentales en la vida de las mujeres, pero subrayando que la experiencia de la vida femenina no podía centrarse en el ejercicio exclusivo de ese rol.

En el terreno educativo fue donde más avanzó el feminismo español. Las iniciativas del Krausismo tras 1850 y de la Institución Libre de Enseñanza(1876) buscaban un avance en la educación, la enseñanza y la cultura femenina.

No obstante, el modelo varió poco y en las escuelas se siguió trasmitiendo pautas de comportamiento basadas en la función doméstica de la mujer. Concebida como “ángel del hogar”, su labor debía dedicarse en exclusiva a los quehaceres domésticos y al cuidado de la familia. La resistencia a la generalización de la enseñanza femenina fue muy acentuada. El reconocimiento oficial del derecho a la educación superior no se produjo hasta 1910. A lo largo de todo el siglo XIX, el analfabetismo femenino se mantuvo en tasas enormemente altas que rondaban el 70% en muchas zonas a fines de la centuria.

En el caso español, hasta principios del siglo XX no se puede hablar con propiedad de un movimiento colectivo de emancipación femenina.

unos cuantos datos más poco conocidos:

1) El voto a la mujer en el mundo tuvo un claro catalizador histórico: el Partido Bolchevique en 1917. El gobierno que forzó la cascada de liberaciones globales del voto para la mujer en el mundo fue el gobierno revolucionario de 1917 de Moscú.
La Unión Soviética de Lenin fue el primer país de peso en dar el voto a las mujeres y en establecer la IGUALDAD SALARIAL por decreto entre hombres y mujeres.
Antes de la URSS, solo dos países coloniales (Australia y Nueva Zelanda) y países que en aquellos tiempos eran económicamente irrelevantes y muy poco poblados (Dinamarca, Suecia y Finlandia) habían permitido el voto a las mujeres.

El resto de países NO LO PERMITÍAN, hasta que los Bolcheviques tomaron el poder...

Los países imperialistas y europeos (Alemania, Estados Unidos, Inglaterra, Italia...) permitirían el voto a las mujeres COMO CONSECUENCIA DEL MIEDO a la revolución bolchevique -que se afanaban en aplastar, pues no olvidemos que el triunfo de Lenin motivó que 14 países la atacasen a la vez hasta 1922.

El voto para las mujeres se implantaría en 1918 en Inglaterra, 1920 en Estados Unidos... Francia e Italia no permitirían votar a las mujeres hasta 1945 y 1947. Para neutralizar la alianza entre feminismo y los partidos revolucionarios dentro de sus territorios, se apresuraron en no quedarse atrás respecto a lo que ya hacían los soviéticos...

2) Actualmente en China, las mujeres se jubilan por ley DIEZ AÑOS ANTES QUE LOS HOMBRES, a los 50 años (60 para los hombres). Es sin embargo difícil encontrar a feministas que remarquen esto como guía y ejemplo y que digan "queremos que aquí se haga como en China" como sí dicen a veces con Finlandia para ciertos aspectos de la educación...

Quien quiera entender la historia y el futuro del movimiento de lucha contra la ideología machista, que mire a los países donde ha habido en algún momento de su historia una revolución socialista.
Si no lo hace, no va a entender qué ha pasado realmente (ni qué está pasando)



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